viernes, 20 de mayo de 2011

Sobredosis de amor!


Hace 3 años mi vida cambiaba para siempre. Camilo llegaba al mundo y traía consigo el mayor de los regalos que una mujer pueda recibir Me convertía en mamá y provocaba en mi el mayor impacto existencial que he vivido y viviré
Camilo luminoso, radiante, amado y soñado desde mucho antes de concebirte Todo lo que mi mente y mi alma algún día imaginó como FELICIDAD lo traía incluido Camilo cuando ese 21 de mayo de tormenta y luna llena llegó a mis brazos y me miró con sus ojitos llenos de paz
Pasaron 3 años y quizás en  tu corta vida mi pollito , este haya sido el que mas cambios y crecimientos tuviste
Te convertiste en un verdadero hermano mayor-!, protector al máximo de "la Destructorita" como le llamas a tu hermana, que no deja de mirarte e imitarte, dueño de una paciencia que a veces se desborda porque si que te tocó una hermanita exigente y demandante eh!
Dejaste los pañales, la mema, el chupete, y hoy mi vida me decís que esas cosas las usabas cuando eras bebé! Verte crecer, me llena de orgullo, ver que transitás  día a día  el buen camino: solidario al máximo con el sentimiento de los demás, ansioso por aprender, persistente en imponer lo que querés, cariñoso y compañero... mi gran compañero de vida! Juntos cocinamos, nos reimos, jugamos, hacemos compras, y hasta a veces un poquito lloramos! Me muero de amor cuando me cuentan que en yoga  te dormís como a mami le pasaba en sus primeras clases, cuando hablás de tus hazañas de nadador en tu segunda clase , vos si que te tenés fe eh! .Yo te digo mi amor y vos mi amora! jajaj ...y cuanto deseo que siempre sea asi!
Te amo mi pollito adorado y si un día lees estas palabras estoy segura que mucho de todo esto lo llevarás en el alma.. la mía la marcaste a fuego mucho antes de ver las 2 rayitas en los 3 test de embarazo que nos hicimos jaja
Feliz cumple, amo compartir mi vida contigo y entregártela cada día, amo la sobredosis de amor que me entregas solo por existir

Mamá

viernes, 13 de mayo de 2011

Cuando las mujeres juntan su cabeza alrededor del fuego

Alguien me dijo que no es casual…que desde siempre las elegimos.
Que las encontramos en el camino de la vida, nos reconocemos y sabemos que en algún lugar de la historia de los mundos fuimos del mismo clan.

Pasan las décadas y al volver a recorrer los ríos esos cauces, tengo muy presentes las cualidades que las trajeron a mi tierra personal. Valientes, reidoras y con labia.
Capaces de pasar horas enteras escuchando, muriéndose de risa, consolando. Arquitectas de sueños, hacedoras de planes, ingenieras de la cocina, cantautoras de canciones de cuna.

Cuando las cabezas de las mujeres se juntan alrededor de “un fuego”, nacen fuerzas, crecen magias, arden brasas, que gozan, festejan, curan, recomponen, inventan, crean, unen, desunen, entierran, dan vida, rezongan, se conduelen.

Ese fuego puede ser la mesa de un bar, las idas para afuera en vacaciones, el patio de un colegio, el galpón donde jugábamos en la infancia, el living de una casa, el corredor de una facultad, un mate en el parque, la señal de alarma de que alguna nos necesita o ese tesoro incalculable que son las quedadas a dormir en la casa de las otras.

Las de adolescentes después de un baile, o para preparar un examen, o para cerrar una noche de cine.
Las de “veníte el sábado” porque no hay nada mejor que hacer en el mundo que escuchar música, y hablar, hablar y hablar hasta cansarse.

Las de adultas, a veces para asilar en nuestras almas a una con desesperanza en los ojos, y entonces nos desdoblamos en abrazos, en mimos, en palabras, para recordarle que siempre hay un mañana.

A veces para compartir, departir, construir, sin excusas, solo por las meras ganas.

El futuro en un tiempo no existía. Cualquiera mayor de 25 era de una vejez no imaginada…y sin embargo…detrás de cada una de nosotras, nuestros ojos.

Cambiamos. Crecimos. Nos dolimos. Parimos hijos. Enterramos muertos. Amamos. Fuimos y somos amadas. Dejamos y nos dejaron. Nos enojamos para toda la vida, para descubrir que toda la vida es mucho y no valía la pena. Cuidamos y en el mejor de los casos nos dejamos cuidar. Nos casamos, nos juntamos, nos divorciamos. O no. Creímos morirnos muchas veces, y encontramos en algún lugar la fuerza de seguir. Bailamos con un hombre, pero la danza más lograda la hicimos para nuestros hijos al enseñarles a caminar. Pasamos noches en blanco, noches en negro, noches en rojo, noches de luz y de sombras. Noches de miles de estrellas y noches desangeladas.

Hicimos el amor, y cuando correspondió, también la guerra. Nos entregamos. Nos protegimos. Fuimos heridas e inevitablemente, herimos. Entonces…los cuerpos dieron cuenta de esas lides, pero todas mantuvimos intacta la mirada. La que nos define, la que nos hace saber que ahí estamos, que seguimos estando y nunca dejamos de estar. Porque juntas construimos nuestros propios cimientos, en tiempos donde nuestro edificio recién se empezaba a erigir.

Somos más sabias, más hermosas, más completas, más plenas, más dulces, más risueñas y por suerte, de alguna manera, más salvajes. Y en aquel tiempo también lo éramos, sólo que no lo sabíamos.

Hoy somos todas espejos de las unas, y al vernos reflejadas en esta danza cotidiana, me emociono. Porque cuando las cabezas de las mujeres se juntan alrededor “del fuego” que deciden avivar con su presencia, hay fiesta, hay aquelarre, misterio, tormenta, centellas y armonía. Como siempre. Como nunca. Como toda la vida. Para todas las brasas de mi vida, las que arden desde hace tanto, y las que recién se suman al fogón.
Autora: Simone Seija Paseyro

miércoles, 11 de mayo de 2011

Mares revueltos

Mares desordenados, revueltos, tormentosos pasan por mi cabeza y mi alma estos dias Emociones fuertes, cumpleaños de  mis hijos, Juana que camina y en vez de alejarse se apega cada vez mas a la idea de que somos una! Le duele y mucho enterarse que mamá es mamá y ella un ser brillante por si misma. Su necesidad extrema de contacto conmigo me alaba y me agota
Camilo entusiasmado con su cumple, y yo organizando eso tambien, el trabajo que hay que cumplirlo, las pocas horas de sueño,mis comidas desordenadas como y donde puedo,  las emociones del pasado que se iluminan con mi maternidad y se alumbran alla lejos, donde estaban muy muy escondidas. Mi marido que hace lo que puede... Ambos hacemos todo lo que está a nuestro alcance pero hay dias que parece que NADA alcanza
Detenerme a una hora del dia y ver como mis hijos crecieron es un impacto existencial, una revolucion total que emociona y golpea y me llena de amor y de responsabilidad, me impulsan a ser auténtica y seleccionar cada cosa con la importancia que el caso enviste. Y cuando digo cada cosa es desde la comida, hasta los planes de fin de semana, hasta los amigos que nos rodean, TODO  Criar un hijo, ayudarlo a que sea un adulto con inteligencia emocional sufieciente, con armas para que las situaciones no lo superen, con AMOR no es poca cosa y requiere de un entorno amoroso y comprometido con la crianza, nuestros valores deben coincidir aunque no plenamnete con nuestras amistades y me he propuesto a eso, pocos amigos muy conocidos con relaciones fuertes y amorosas
Veo a Juana luchando por crecer, y a Camilo cada vez mas hermoso y con su personalidad cada vez mas definida... y los veo a ambos por el buen  camino Eso alcanza y sobra para vencer cualquier mar revuelto que me visite estos dias.
Agotamiento+Responsabilidad+Verlos crecer y emocionarme+todo el resto de mis responsabilidades+mis emociones que creia olvidadas y despiertan con mi maternidad= Mar revuelto por momentos
Suena logico no?
Post revuelto para dias complejos